¿MOLESTA?.....era uno de esos días en que simplemente todo me apestaba, todo salía mal; estaba aspirando la oficina, eran las 11:00 a.m, me senté en el escritorio, prendí la computadora y ohhhh sorpresa el internet solo se podía utilizar para trabajos del estudio, ¡GENIAL! no podía abrir el msn, no me quedo de otra más que leer expedientes y organizar todos los escritos; casos, casos y más casos, que ironía, acaso ¿no estaba ahí justamente para eso?, afortunamente llegó la hora de almuerzo, salí, no tenía hambre, sentía bilis en toda la garganta, estaba cerca de la vía expresa, recordé que ahí había un starbucks, entre, pensé en tomar un caramel macchiato (expresso y vainilla con una cubierta de caramelo caliente) pero no, decidí comprar mi clásico frappuccino, era invierno y me congelaba, en ¿qué diablos pensaba?, salí y entre a ripley, me puse a ver las nuevas tendencias, la ropa "in", ¡que tonteria!. La ropa me distraia, miraba colores, zapatos, bolsos y accesorios, pero ¿para qué? si no iba a comprar nada; las combinaciones eran fabulosas y los precios exuberantes, pensé: algún día llegaré y me compraré todo lo que quiera sin tener que mirar precios, que pensamiento tan egoista, superficial y frívolo; como si no hubieran cosas más importantes que yo y mis vanalidades; en ese momento solo quería regresar a casa, olvidar todo, hacer lo mismo de siempre, perder el tiempo y sumergirme en una gran nada.
Ya había pasado una hora, era tiempo de regresar a mi prisión, llegué y de nuevo a lo mismo ¡que martirio!; después de varias horas levante la mirada, eran las 7:00 p.m, dije: gracias al cielo, salí apresurada, casi corriendo y dije SUPER! ahora a subirme a la 35 y ser aplastada x la multitud, la AV. estaba congestionada, para mi gran suerte ese día llevaban a LADY BARDALES, si ella, la concubina de Toledo wowww todo estaba de mi lado por lo visto, que afortunada era; el mal humor no me impedía pensar y no tenía ganas como para quedarme atascada en el tráfico, así que decidí caminar hasta un lugar prudente, un paradero donde la congestión disminuyera, era buena idea pasar todos los cruces donde se atascaban los carros como la arequipa con javier prado entonces me dispuse a andar.
Estaba en la petit thouars, sentía gotas de agua sobre mi cara, estaba garuando, me congelaba; me acerque a una tienda a comprar un cigarrillo, mi maldita cajetilla se había acabado, pedí un kent, no tenían, pedí un lucky y me dijeron: señorita no vendemos cigarros, no fume es malo para la salud, avergonzada y enojada camine a la siguiente tienda, conseguí mi querido kent 4 y acompañada del humo entre mis labios continue caminando. Era una noche tenue, muy fría por cierto, solo quería dejar de sentir aquello que nisiquiera sabía lo que era, o ¿si lo sabía?, entonces comencé a aceptar la realidad, ¿porqué estaba así?, estaba triste y no lo quería reconocer, no podía llorar, no debía dolerme, pero no podía evitarlo, si me dolía, me di cuenta que la traición duele, ¿TRAICIÓN? ¿que era eso? ¿realmente me había traicionado?.........medite un momento,cuando lo comprendí las lágrimas brotaron, el dolor se difuminó con mi llanto, me desahogue y es que ¿en que estaba pensando? ¿cuanto iba a durar la HIPOCRESÍA?.
Ya más tranquila, todo tenía sentido de nuevo, ya no tenía que huir porque te confieso que ese día te dije: ¡me voy! y me puse como no conectada; simplemente no podía hablarte, era algo más fuerte que yo; recuerdo que me dijiste ¿estas triste? y muy cínica te dije: NO ¿tendría alguna razón para estarlo?, con el mismo cinismo respondiste: No, solo preguntaba mañana hablamos. Era la primera vez que no te llamé, sabías que algo sucedia, pero no querías hablar, tenías miedo de ponerte al descubierto, al parecer no me tenías la confiansa suficiente, querías dejar pasar el tiempo y olvidar, pero yo no podía.
Me tomo dos días darme cuenta de todo, luego pude hablarle sin frases ambiguas de reclamo, aunque quizás ni cuenta se dio, no quería explicaciones, nunca las quise, no tenía porque dármelas y es que lo único que no soportaba era su silencio.
LAMENTO haberte herido, porque si te conozco como sé que lo hago, lloraste más que YO, lo lamento porque lo sabía, lo hice adrede para lastimarte, tu consciencia era tu peor CASTIGO; el no decírmelo, el sospechar que lo sabía te angustiaba; yo fingía no saber nada y la culpa te mataba; apesar de ello no tenías el valor de decírmelo a la cara; solo quería que hablaras, era mi manera de obligarte a confesar, pero te conozco tanto así, que sabía que no lo harías. Pero te quiero tanto que no podía seguir así contigo, con esa incomodidad al hablarnos, no podía engañarte, te nesecitaba, nesecitaba confiar en ti nuevamente, fue cuando te lo dije, me sentí mucho mejor y sé que tú también; puedes tener la seguridad que todo lo que te dije fue sincero, cuando te volví a decir te quiero fue uno verdadero............ =)
5 comentarios:
Ironico no???? Xq yo no siento lo mismo??? xq mi conciencia no se siente mal con ella??? Será acaso que no la considero mi amiga? o tal vez será q El me importa más??
Creo que conozco esta historia... me gusta tu forma de narración :)
Publicar un comentario